El documento lo presentó el líder de ese territorio, Vadim Krasnoselski, con el objetivo de tomar medidas por la tensa situación energética por la que atraviesa la autoproclamada república y toda Moldavia, destacó este miércoles el canal de televisión Moldova 1.
El pasado 6 de diciembre, la oficina de Krasnoselski comunicó que tras una reunión, «los miembros del Consejo de Seguridad tomaron una decisión unánime sobre la introducción en Transdniéster de una emergencia económica».
El estado de emergencia económica en la república entrará en vigor seis horas después de la publicación de la decisión del Consejo Supremo en el sitio web del Ministerio de Justicia.
La decisión se debe a una posible crisis energética relacionada con un riesgo de cese o reducción del suministro de gas natural a la república.
La historia de la república rebelde de Transdniéster se remonta a 1992, cuando varios distritos de la ribera oriental del Dniéster, de población rusohablante, se rebelaron contra Chisinau y proclamaron la independencia por miedo a que Moldavia se fusionara con la vecina Rumanía tras el colapso de la Unión Soviética.
Chisináu respondió con el envío de tropas al territorio rebelde, lo que provocó un conflicto armado que se prolongó por varios meses.
Actualmente Transdniéster es un territorio fuera del control de Chisinau, con todos los atributos de un Estado, incluida su propia moneda.
El mantenimiento de la paz en la zona del conflicto corre a cargo de la Comisión de Control Conjunta y un contingente militar mixto de Rusia, Moldavia y la autoproclamada república.
El territorio rebelde insiste en obtener la independencia, pero Moldavia se la niega, ofreciendo a cambio una amplia autonomía.
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