En la emblemática plaza Omeya de esta capital, decenas de miles se concentraron izando la nueva bandera del país y coreando consignas que expresan unidad nacional y esperanza por futuro mejor.
Prensa Latina aquí entrevistó a varios de los manifestantes quienes expresaron su alegría por el cambio y pidieron enjuiciar a todos los implicados en crímenes anteriores.
Similares manifestaciones tuvieron lugar en las cabeceras provinciales de Homs, Hama, Alepo, Idlib, Deraa y Latalia, y en decenas de ciudades de esta nación árabe.
Las marchas han sido convocadas tras las oraciones del viernes, donde los imanes de las mezquitas enfatizaron en sus sermones, la necesidad de evitar el caos y de construir a Siria con el empeño de todos.
Prensa Latina estuvo en el sermón del viernes en la Gran Mezquita Omeya, el lugar más emblemático de Damasco, donde se constató una presencia masiva y sin precedentes de fieles, y el actual primer ministro interino, Mohammed Al-Bashir, pronunció un discurso en el que llamó a preservar la estabilidad y la paz civil, y a evitar manifestaciones de caos y desorden.
El día 8 de este mes y tras la llegada de los grupos armados de la oposición a Damasco, la capital, el derrocado presidente Bashar Al-Assad, salió del país tras 24 años de estar en el poder, mientras el partido Baath gobernante decidió suspender su actividad política hasta nuevo aviso.
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