Según anunció el directivo este sábado a la prensa, Kavelashvili recibió 224 votos de 300, y para ser elegido presidente, él necesitaba 200 votos.
Con esta comunicación, la CEC refirió que las elecciones presidenciales en Georgia finalizaron y se consideran válidas, ya que en ellas participó más de la mitad del colegio electoral, compuesto por 300 personas, en tanto, la retransmisión de los comicios se realiza en directo a través del sitio web del órgano legislativo.
El proceso de votación tuvo lugar en el edificio del Parlamento y transcurrió con calma. La reunión comenzó a las 9:00 (hora de Tiflis), estuvo dirigida por la CEC de Georgia, y en misma no participó la oposición, que citó a sus partidarios a protestar en la calle.
Esta es la primera ocasión en la historia de Georgia en la que el presidente no es elegido mediante una votación directa, sino por un colegio electoral de 300 personas. El único candidato a la presidencia era el exfutbolista y diputado Kavelashvili, nominado por el partido gobernante Sueño Georgiano.
Los cuatro partidos de oposición que ingresaron al parlamento como resultado de las elecciones se negaron a trabajar en el órgano legislativo, calificando las elecciones de fraudulentas.
La presidenta de Georgia, Salomé Zurabishvili, dijo que no renunciaría a su cargo, y aseguró que cree que «con un parlamento ilegítimo no puede haber elecciones presidenciales legítimas».
Zurabishvili también se declaró la única representante legítima del poder en el país.
El primer ministro, Irakli Kobajidze, en respuesta a sus afirmaciones, indicó que comprende «el estado emocional de Zurabishvili», pero «el día de la toma de posesión, el 29 de diciembre, ella tendrá que dejar su residencia y ceder este edificio al presidente legítimamente elegido».
Desde el pasado 28 de noviembre, después de que el primer ministro de Georgia suspendiera hasta 2028 las negociaciones con la Unión Europea sobre el proceso de adhesión del país al bloque comunitario, los detractores del actual gobierno protagonizaron protestas frente a la sede parlamentaria.
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