Tras un esfuerzo a gran escala lanzado para hacer frente a la creciente crisis, la agencia llegó en octubre a 2,8 millones de personas en todo Sudán con alimentos, dinero en efectivo y asistencia nutricional, el total mensual más alto desde el inicio del conflicto.
Actualmente, el PMA refuerza 14 puntos críticos de hambre, incluidos los lugares asediados de las regiones de Darfur, Kordofán, Jartum y Gezira.
En medio de las condiciones volátiles y peligrosas por la guerra, la ayuda ha llegado a zonas como los campamentos de Zamzam, Abu Shouk y Al Salam en Darfur septentrional, y a las comunidades de desplazados internos en Darfur central y meridional, agregó el Programa en un comunicado.
Otras zonas como Kereneik y Sirba, en Darfur Occidental, recibieron igualmente asistencia alimentaria para miles de personas, lo que resulta vital para quienes enfrentan el riesgo de hambruna.
En ese caso se encuentra el campamento de Zamzam, el único lugar del mundo con hambruna confirmada, devenido además punto focal de los esfuerzos del PMA para brindar apoyo hasta a 135 mil personas.
Este mes la agencia aumentó en cuatro veces la ayuda a los sudaneses en comparación con septiembre, mientras las hostilidades obstruyen las rutas de suministro críticas.
Para ello, la entrada de insumos desde el vecino Chad resultan vitales, sin embargo, la ruta permanece amenazada por el aumento de la violencia a lo largo de sus corredores con riesgos para los trabajadores y los suministros humanitarios.
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