El portal EcoNews, el semanario The Post y los periódicos La Tempête des Tropiques y Congo Nouveau se hicieron eco de la denuncia contra el gigante norteamericano por incluir en su cadena de suministros cobalto que proviene de las zonas ocupadas por rebeldes con la ayuda de Ruanda.
Si bien otras empresas podrían verse involucradas, la RDC ha insistido con Apple por su poder financiero y su simbolismo.
Desde abril pasado el Gobierno congoleño pidió explicaciones al gigante tecnológico, mediante una carta dirigida al presidente de la compañía, Tim Cook, donde demandaban una respuesta sobre el supuesto uso de minerales procedentes de las zonas en conflicto en el país.
A través de un grupo de abogados dirigido por Robert Amsterdam en Washington, Estados Unidos, y William Bourdon en París, Francia, demandaron de la empresa una respuesta sobre la estructura de la cadena de suministros, que de acuerdo con un informe podría estar contaminada con minerales extraídos ilegalmente de territorio congoleño.
El reporte mencionado acusaba a Ruanda y a entidades privadas de ser los suministradores, algo que la compañía negó.
En esto se basa la denuncia interpuesta ahora por la RDC, que acusa a Apple de comprar minerales contrabandeados desde el este del país a Ruanda, donde los blanquean y los integran en las cadenas de suministro globales.
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