En declaraciones a la televisora qatarí Al Jazeera, Basal calificó de locura las incursiones israelíes contra esos centros, muchos de los cuales son administrados por la Organización de Naciones Unidas (ONU).
Ante esa situación, reclamó a la comunidad internacional actuar para obligar al gobierno de Benjamín Netanyahu a detener la guerra.
El mundo debe despertar y decir basta, afirmó el portavoz de esa institución de socorro.
Hace unos días, la entidad denunció que 90 de sus trabajadores murieron en ataques israelíes desde el comienzo del nuevo ciclo de violencia en la región, el 7 de octubre de 2023.
En reiteradas ocasiones, la Defensa Civil advirtió que está cerca de paralizar todos sus servicios en el territorio como consecuencia de la agresión y el bloqueo del vecino país, una situación que afectará a más de dos millones de palestinos.
Desde el inicio de la campaña bélica, hace 14 meses, el Ejército ataca deliberadamente nuestras instalaciones y vehículos, afirmó recientemente.
Atravesamos la etapa más difícil desde nuestra creación en 1994, debido a la erosión del personal humano y la destrucción de equipos, alertó y culpó a Israel y a Estados Unidos, su principal aliado, por las repercusiones de la agresión.
El director de Suministros y Equipamiento del organismo, Muhammad Al-Mughair, explicó que la institución sufre una crisis asfixiante y destacó que los equipos de socorro prestan servicios mínimos en la región meridional.
El enclave costero está bajo fuego israelí desde hace 14 meses como resultado de lo cual más de 45 mil palestinos murieron y 107 mil sufrieron heridas.
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