Según la Oficina de Estadísticas Nacionales (ONS, por sus siglas en inglés), el Producto Interno Bruto (PIB) tuvo un crecimiento nulo en el período de julio a septiembre de 2024, en vez de progresar al menos en 0,1 puntos porcentuales como señaló una estimación anterior.
También recortó los cálculos del PIB para el segundo trimestre del año, al rebajar la proporción del 0,5 al 0,4 por ciento, mientras confirmó una expansión del 0,7 por ciento al cierre de los tres primeros meses.
Al decir de directora de estadísticas del organismo, Liz McKeown, «la economía fue más débil en el segundo y tercer trimestre de este año frente a lo que sugerían nuestras estimaciones iniciales, con bares y restaurantes, empresas legales y de publicidad, en particular, con un menor rendimiento».
A lo largo de 2024, la economía británica no logró levantar cabeza, con una inflación persistente y un alto costo de la vida, pese a medidas centradas en la inversión en infraestructura y la promoción de industrias, sobre todo, vinculadas al sector tecnológico y las energías renovables.
ro/mjm