Puerto Príncipe sigue hoy desconectado del mundo, y muchos ya están resignados, y las navidades ya están aquí.
Los aviones sobrevuelan a más de 10 mil metros de altura la llamada Perla de las Antillas, dejando atrás un rastro blanco en el cielo,pero al parecer, nadie aterrizará en el Tussaint Louverture en diciembre.
Las aerolíneas de los cuatro principales países de destino de los viajeros regulares dejaron de operar vuelos a la capital haitiana.
No hay viajes comerciales programados entre Haití y República Dominicana, Estados Unidos, Canadá o Francia en las próximas semanas. Las empresas, una tras otra, pospusieron la fecha de su regreso al espacio aéreo haitiano.
La única conexión en los últimos días entre Haití y el resto del mundo fue un vuelo chárter a Brasil como parte de un programa de reunificación familiar.
De acuerdo con la versión digital del diario Le Nouvelliste, no se trataba de un vuelo comercial con horario regular y boletos a la venta en el circuito de agencias de viajes.
Recordó el rotativo que la prohibición emitida por la Administración Federal de Aviación de Estados Unidos está pesando sobre el sector e influye en la toma decisión de otras naciones.
El diario señaló que las autoridades haitianas, tras anunciar la reapertura del aeropuerto, no detallaron las medidas adoptadas o puestas en marcha para garantizar la seguridad de las aeronaves, los pasajeros y el personal.
Los arrendadores de aviones, los fabricantes y aseguradoras siguen preocupados, aunque el gobierno asegure que el aeródromo está a punto de volver a la normalidad, los operadores comentaron que la realidad es otra.
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