El avión, que cubría la ruta de Bakú a Grozni, la capital chechena, cayó en el aeropuerto de Aktau, consignó este miércoles una comunicación de la compañía de television Qazaqstan RTRK.
Según la anota, a la escena del siniestro acudieron 52 efectivos y 11 medios del Ministerio de Emergencias de Kazajstán que hallaron la aeronave en llamas. Los equipos de rescate procedieron a la extinción del incendio, comunicó el ente.
La titular de Salud kazaja, Akmaral Alnazárova, informó en un principio de seis sobrevivientes, cuya condición es extremadamente grave, pero el Ministerio de Emergencias precisó más tarde que, según la información preliminar, hay 25 sobrevivientes, de los cuales 22 fueron trasladados al hospital regional.
Al lugar de la catástrofe, según la ministra de Salud, se enviaron un avión con servicios médicos y 14 ambulancias.
La compañía Azerbaiyán Airlines confirmó que su avión, un Embraer 190 que realizaba el vuelo J2-8243 de Bakú a Grozni con 62 pasajeros y cinco miembros de la tripulación a bordo, se estrelló durante un aterrizaje de emergencia, a unos tres kilómetros de Aktau, tras tropezar con una bandada de aves.
Según el Ministerio de Transporte de Kazajstán, en la aeronave viajaban 37 nacionales de Azerbaiyán, 16 rusos, seis kazajos y tres kirguises.
Más temprano, un portavoz del aeropuerto de la capital chechena dijo que el vuelo J2-8243 fue desviado a la ciudad de Majachkalá debido a la niebla, y de allí a Aktau, al otro lado del mar Caspio.
El aeropuerto de Aktau suspendió las operaciones hasta las 14:00 (hora de Astaná) debido al accidente.
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