A través de una declaración, el movimiento político y militar libanés calificó la agresión israelí de una flagrante violación del derecho internacional y humanitario y una escalada de la arrogancia y el salvajismo del enemigo, que continúa contra los pueblos de la región, en particular en Palestina, Líbano y Siria.
De acuerdo con Hizbulah, esta nueva incursión es consecuencia del fracaso israelí a la hora de hacer frente a las operaciones militares y la firme postura de Yemen en su apoyo al derecho del pueblo palestino a su tierra y libertad.
La Resistencia libanesa reafirmó su plena solidaridad con el valiente pueblo de Yemen que demuestra su firmeza en esta causa.
A su vez, renovó la confianza en este pueblo resistente, que continúa el camino de la resistencia y la dignidad con su liderazgo sabio y valiente para enfrentar esta agresión.
En su comunicado, llamó a todos los pueblos libres del mundo y a las fuerzas honestas y resistentes de la región árabe e islámica a unirse para hacer frente a la hostilidad israelí.
Pidió alzar las voces frente al silencio internacional y a sus instituciones impotentes y sumisas a la voluntad estadounidense, y destacó la necesidad de continuar la Resistencia frente a este enemigo sionista y sus partidarios.
Israel atacó este jueves el aeropuerto de Saná y los puertos de Hodeidah, Salif y Ras Isa, en presencia del director de la Organización Mundial de la Salud, Tedros Adhanom Ghebreyesus, y personal de la ONU.
La incursión coincidió con el discurso semanal del líder del movimiento Ansar Allah de Yemen, Abdul Malik Al-Houthi, quien aseguró que la efectividad e intensidad de las operaciones desde Yemen tomó por sorpresa al enemigo israelí.
A propósito, la referencia indicó: «nuestros ataques con misiles, que sus sistemas de defensa aérea no lograron interceptar, causaron una frustración significativa entre los funcionarios políticos y de seguridad en Israel y Estados Unidos».
En valoración del jefe de la Resistencia yemenita, la postura hacia el pueblo palestino es de principios, y «nunca nos desviaremos de ella, independientemente de las presiones o tentaciones».
Para el líder de Ansar Allah, tanto el enemigo israelí como sus mercenarios fracasaron en los intentos de agredir a la nación y acabar con su apoyo al pueblo de Gaza.
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