El designado secretario de la Presidencia, Alejandro Sánchez, dijo a la prensa que las reuniones entre ministros salientes y entrantes han comenzado a compartir información clave y establecer prioridades para la nueva administración.
Sánchez, afirmó que el proceso avanza en torno a tres ejes principales: temas sensibles que requieren atención inmediata, decisiones a tomar durante la transición y planificación a largo plazo.
Aseguró que los equipos ministeriales estarán completamente definidos para principios de enero, mientras que las autoridades de entes y empresas públicas se conformarán en la segunda quincena del mismo mes.
El cercano colaborador de Orsi reafirmó que la situación de la seguridad ciudadana será prioridad inmediata, cuando en estos días finales del año se multiplicaron los homicidios en el país, sobre todo en esta capital.
En poco más de 24 horas ocurrieron ocho asesinatos, seis de ellos en barrios capitalinos.
Refirió la importancia de construir estrategias y promover acuerdos con partidos políticos, academia y sociedad civil para encarar el tema.
Sobre la posibilidad de decretar una emergencia en seguridad, indicó que es una prioridad para la gente, por lo cual el asunto está en la agenda
Alejandro Sánchez manifestó que falta información del gobierno sobre proyectos como el Neptuno, de infraestructura hídrica, que impulsa la administración actual, pero sobre el cual hay reparos de organizaciones sociales y expertos del Frente Amplio.
También se esperan datos sobre el proyecto de hidrógeno verde con la multinacional HIF Global, sobre el cual las autoridades gubernamentales decidieron no tener participación y dejarlo solo al capital privado.
Esa decisión provocó la renuncia del hasta ahora presidente de la empresa estatal de combutibles, Ancap, Alejandro Stipanicic.
Sánchez ponderó la importancia de tener puertas abiertas para una posible participación estatal en la inversión que propone producir combustibles sintéticos.
Respecto a temas internacionales, el futuro secretario de la Presidencia aseguró que el gobierno electo dialogará con todos los líderes de la región y promocionará las relaciones de Estado por encima de diferencias ideológicas.
“Uruguay necesita un buen relacionamiento con Argentina, Brasil, Paraguay y el resto del Mercosur, sostuvo.
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