Luego de la operación de rescate, que tardó cerca de tres horas, el ministro de Defensa Nacional, Henry Sáenz, reveló la identidad de los tripulantes, el teniente de aviación Carlos Álvarez Arias, con 12 años de servicio, y el capitán Estuardo González Barrios, con 16.
«El helicóptero se hundió inmediatamente, con la trágica noticia de que perdimos a dos pilotos, a una tripulación completa», detalló el titular.
Agregó que los cuerpos se encontraron a 500 metros del accidente, pero debieron trasladar a buzos militares expertos para su rescate.
Sáenz, citado por el diario local Prensa Libre, confirmó que se encaminaban a apoyar las diligencias en torno a una avioneta que fue encontrada incinerada la víspera con posibles ilícitos.
Señaló que llevaban al menos dos días tratando de llegar hasta el lugar; sin embargo, pobladores les impidieron el paso.
Argumentó que este domingo se hicieron allanamientos para dar con la supuesta carga y el helicóptero siniestrado era parte de las maniobras.
“No podemos seguir con esta dinámica en la que el crimen organizado le paga a la población y sigue el flagelo”, remarcó la autoridad. La droga continúa en la sociedad y daña a nuestra juventud, enfatizó.
Antes, la cartera de Defensa informó mediante un comunicado que del Comando Aéreo Central «La Aurora» despegó el helicóptero BELL, modelo -407GX, cuyo objetivo era ayudar en «las operaciones que se realizan en apoyo de las fuerzas de seguridad públicas».
El ministro de Gobernación del país, Francisco Jiménez, descartó que la nave perteneciera a la Policía Nacional Civil y habló de fuertes rumores de que fiscales iban en el helicóptero.
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