En su cuenta de la red social X, el mandatario también divulgó un mensaje previamente divulgado por la Dirección de Asuntos Religiosos del Ministerio del Interior en donde se rechaza la masacre, que dejó cuatro personas fallecidas.
La oficina mencionó que los asesinados fueron el pastor Marlon Lora, su esposa Yurlay Rincón y sus dos hijos, Ángela Lora y Santiago Lora, quienes pertenecían a una iglesia adscrita a la misión de Iglesias Bíblicas Misioneras.
“Expresamos nuestra solidaridad con las familias de las víctimas y la comunidad religiosa. Hacemos un llamado urgente a la Fiscalía, a la Policía y a las autoridades locales a esclarecer los hechos y dar con la captura de los responsables”, se lee en la comunicación.
También hizo un llamado a la Defensoría, a la Procuraduría y a la Unidad Nacional de Protección a sumar esfuerzos conjuntos a favor de la prevención y protección del derecho humano a la libertad religiosa y de cultos.
De acuerdo con el Instituto de Estudios para el Desarrollo y la Paz, la familia fue agredida en un restaurante donde murieron tres de ellos, mientras que el hijo falleció en el hospital.
Esta masacre es la número 76 que ocurre en el país en el transcurso de este año, y la tercera en el departamento de Cesar, según los datos de esa entidad.
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