El viceministro de Lucha Contra el Contrabando, Luis Amílcar Velásquez, afirmó este lunes que en La Paz fueron decomisados tres mil kilogramos de carne de cerdo y 220 sacos de yuca, alimentos valorados en 147 mil bolivianos (21 mil dólares).
«Hemos incrementado nuestros efectivos para tener mejores resultados, es así que en los últimos meses hemos tenido decomisos importantes como éste”, sostuvo citado en un reporte institucional.
Describió que el primer operativo ocupó en dos minibuses unas 30 unidades de carne de cerdo, (15 en cada uno), con un total de tres mil kilogramos, cuyo valor asciende a 114 mil bolivianos (más de 16 mil 200 dólares).
Añadió que la Fuerza de Tarea Conjunta (FTC) Alfa, en un patrullaje realizado en el sector de Santiago de Machaca, decomisó 220 sacos de yuca con un valor de 33 mil 700 bolivianos (más de cuatro mil 700 dólares).
Indicó que en las zonas fronterizas de Desaguadero (limítrofe con Perú) y Bermejo (colindante con Argentina), debido a las fiestas de fin de año, se ejecutan controles intensivos para garantizar la seguridad alimentaria mediante el freno al contrabando a la inversa.
Las autoridades de Bolivia dan esa denominación al trasiego de alimentos y combustibles hacia el extranjero, donde se comercializan a precios varias veces más caros que en Bolivia, con la correspondiente escasez y su encarecimiento en el mercado interno.
Al referirse al tráfico ilegal de carburantes, el director de la Agencia Nacional de Hidrocarburos (ANH), Germán Jiménez, subrayó que en un semestre del año en curso fueron incautados a los contrabandistas más de 451 mil litros de diésel y gasolina.
Como resultado de estas interdicciones resultaron aprehendidas 323 personas involucradas en este tipo de ilícitas.
Cifró en “25 cisternas (las) que han sido incautadas durante este medio año, llenas de diésel que estaba desviado para actividades ilícitas para el norte de La Paz (…), más de 400 mil litros en diésel, más de 51 mil litros en gasolina”.
Entrevistado por el canal estatal Bolivia Tv, recordó que según el Código Penal vigente este delito prevé una sanción de entre tres y seis años de cárcel.
Explicó que en la mayoría de los casos se develó que los infractores recurren a tanques adicionales y modificados, cargas repetidas y otras estrategias para delinquir.
“La normativa establece que toda persona puede transportar hasta 120 litros sin una hoja de ruta o una orden por parte de (la Dirección de) Sustancias Controladas. Cuando una persona carga o transporta más de 120 litros tiene que tener una hoja de ruta”, concluyó la autoridad.
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