El Ministerio de Asuntos Exteriores y Expatriados criticó en un comunicado los dobles estándares globales, que paralizaron cualquier oportunidad de detener la guerra contra el enclave costero, iniciada en octubre de 2023.
Al respecto, denunció las matanzas, la destrucción, el desplazamiento de la población y la hambruna en ese territorio, en especial en el norte, blanco de una ofensiva terrestre del Ejército desde hace tres meses.
Asimismo, cuestionó el incumplimiento de las resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU sobre el tema.
Responsabilizamos “al Estado ocupante y a los países que lo apoyan por la continua incapacidad de la comunidad internacional para detener el genocidio de nuestro pueblo”, subrayó.
Este fin de semana, la Cancillería criticó otra vez el fracaso del Consejo de Seguridad por su fracaso en poner fin a la guerra.
Netanyahu se aprovecha de esa situación para abusar de nuestro pueblo en Gaza y convertir a esa zona “en una tierra quemada e inhabitable”, subrayó.
Al respecto, condenó la destrucción de hospitales y viviendas, los masivos bombardeos contra civiles y el desplazamiento forzado de la población del enclave.
Denunciamos la convivencia de la comunidad internacional “con estas escenas de genocidio y desplazamiento de nuestro pueblo”, recalcó.
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