Se trata de un objetivo que debemos fijarnos, dijo a la prensa después de un recorrido por el hospital de campaña montado para socorrer a la población local, en un escenario de críticas al Estado por su reacción tras el fenómeno meteorológico que azotó el 14 de diciembre a un territorio que ya era considerado el más pobre de Francia.
De acuerdo con Bayrou, en las próximas horas presentará un plan de ayuda al archipiélago del Océano Índico, iniciativa que ofreció debatir con sus autoridades.
Este plan contiene todos los puntos identificados para aportar respuestas rápidas, precisó en Mayotte, donde el ciclón con sus vientos superiores a los 200 kilómetros por hora agravó las carencias de sus habitantes, además de destruir barrios pobres y provocar la falta de agua y comida.
Respecto a la cifra de fallecidos, establecida oficialmente en 39, negó que Chido dejara miles de muertos, un balance temido por algunos dado el nivel de devastación causado por el meteoro.
Sin embargo, diversas fuentes evocan que la cifra de víctimas fatales jamás podrá conocerse con certeza, a partir de situaciones como la inmigración ilegal y la tradición musulmana de enterrar a los muertos en menos de 24 horas.
Bayrou está acompañado por ministros como los de Ultramar, Manuel Valls, y de Educación, Élisabeth Borne.
El primer ministro nombrado este mes por el presidente Emmanuel Macron enfrentó críticas por viajar a Pau, donde continúa en el puesto de alcalde, antes de hacerlo a Mayotte.
Macron fue hace unos días al departamento de ultramar, desde el cual prometió una ley especial para su reconstrucción.
El jefe de Estado tuvo que lidiar con denuncias y acusaciones de pobladores molestos por la situación, calificada de abandono por políticos de izquierda.
jcm/wmr
