González, de 48 años, compareció a primera hora a una ceremonia cerrada para la jura en la sede del Tribunal Supremo puertorriqueño en la isleta de San Juan, antes de asistir a una misa católica en la iglesia Santa Teresita en el sector capitalino de Santurce, acompañada de su esposo, José Yovin Vargas, y por distintos personalidades y funcionarios de su gobierno.
Mientras se oficiaba la misa, una joven se subió a uno de los bancos traseros de la capilla para gritar “Muerte a Jenniffer González” y “Muerte al PNP”, en referencia a su partido, por lo que fue sacada del lugar por agentes de seguridad vestidos de civil.
Posteriormente, ya en la calle Loíza, amplió su grito a los periodistas indicando que no se trataba de una amenaza sino de una realidad y se marchó del área.
Con miles de abonados sin electricidad desde la noche del miércoles, después que se había restituido el servicio tras el colapso general que dejó a Puerto Rico a oscuras el día de Año Viejo, representantes de diversas organizaciones ecologistas se manifestaban en el Puente Dos Hermanos, a la entrada de la isleta del Viejo San Juan, donde hubo forcejeos con la policía.
Un manifestante, identificado como Félix Omar Colón, nieto del fenecido dirigente independentista Noel Colón Martínez, fue detenido por la policía sin que hubiera una aparente razón, aunque se le vio argumentar con algunos agentes.
Luego trascendió que dos mujeres también se encuentran arrestadas en un cuartel policial por presuntamente por lanzar amenazas no especificadas.
Mientras, en el Capitolio se movilizó la Fuerza de Choque de la Policía al impedirse la entrada al senador Eliezer Molina, electo por nominación directa de los ciudadanos después de negársele figurar en la boleta como aspirante independiente.
En el acto protocolar de la inauguración de González, frente al Capitolio, también se expulsó a varias personas que intentaban protestar, mientras desde la tribuna intervinieron fundamentalistas religiosos —y hasta un rabino que exaltó al estado genocida de Israel.
Al acto asistieron varios exgobernantes boricuas, incluida Sila M. Calderón, primera mujer electa mandataria en Puerto Rico, así como el presidente de la República Dominicana, Luis Abinader.
La congresista estadounidense María Elvira Salazar, que asistió a la actividad de quien describió como su amiga, “a la que vamos a extrañar” en el Congreso, leyó un mensaje del presidente Donald J. Trump dirigido a la gobernante electa.
González, quien derrotó en primaria al gobernador Pedro R. Pierluisi en junio y después prevaleció en las elecciones del 5 de noviembre de 2024 con el 41 por ciento de los votos, se comprometió en su mensaje a impulsar la estabilidad, a trabajar en equipo, y a abogar por la plena anexión de Puerto Rico a Estados Unidos, para “tener mayores oportunidades”, después de 126 años de dominio colonial de Washington con la mitad de la población bajo nivel de pobreza.
“No voy a ser una gobernadora de grandes obras, sino de infraestructura que funcione”, apuntó al hacer una breve mención de la crisis ocasionada por los consorcios privatizadores norteamericanos LUMA Energy y GeneraPR, a la vez que hay problemas en otras áreas, como educación y el servicio de agua potable.
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