Una masa de aire frío comenzó a desatar, desde este viernes, fuertes nevadas que podrían intensificarse mañana y alcanzar hasta 50 centímetros en la región de Tohoku y registros similares en otras.
En las primeras horas del día, en la cordillera de Hakkoda, prefectura de Aomori, se registró un acumulado de 412 centímetros de nieve, a las 5:00, hora local, una cifra que excede en más del doble a la media.
Entre las consecuencias de las nevadas, la Dirección de Meteorología de Japón mencionó posibles cortes del tráfico, así como accidentes ocasionados por la acumulación en los cables eléctricos y los árboles, incluso habló de la probabilidad de avalanchas.
Dada la inestabilidad de las condiciones atmosféricas, se sugirió a los ciudadanos este viernes estar atentos ante la posibilidad de rayos, granizo, tornados y ráfagas repentinas de viento.
La costa del mar del Japón entre el norte y el oeste del país sufrirá el embate de los vientos hasta el domingo, con posibles ventiscas en algunas zonas, mientras se esperan grandes acumulaciones en la parte septentrional y oriental del archipiélago, principalmente en las zonas montañosas.
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