Durante el primer Consejo de Ministros del gobierno formado el 23 de diciembre, el jefe de Matignon estimó que existe un camino para superar la inestabilidad, aunque en suelo galo se considera probable que también enfrente una moción de censura en la Asamblea Nacional, como la que derribó a Barnier hace un mes.
Según diversas fuentes, en la reunión encabezada por el presidente Emmanuel Macron se perfilaron aspectos del discurso de política general de Bayrou ante la Asamblea Nacional, señalado para el 14 de enero, un momento esperado por la oposición, del que pudiera salir una moción promovida por la izquierda.
Al finalizar el Consejo de Ministros, la portavoz gubernamental, Sophie Primas, precisó que las conversaciones con las fuerzas políticas y parlamentarias serían valiosas en particular para el Presupuesto del Estado de 2025 y el de la Seguridad Social.
Una de las prioridades del nuevo gabinete es la elaboración del Presupuesto, después de que naufragara el anterior texto, con la caída a principios de diciembre de Barnier.
Bayrou caminará por la cuerda floja al igual que su antecesor en el cargo, aunque de momento solo la izquierda parece dispuesta a buscar en enero la censura del primer ministro, mientras la extrema derecha observa si se transgrede las líneas rojas que fijó.
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