En 2024 China pasó a ser el segundo proveedor más importante del mercado salvadoreño, con ventas superiores a los dos mil 423.2 millones de dólares de enero a noviembre, un 16.6 por ciento de todo lo comprado por El Salvador.
Ese volumen de compras, sin embargo, incrementó el desbalance comercial ya que las exportaciones salvadoreñas apenas alcanzaron los 52.2. millones de dólares, según datos de Banco Central de la Reserva (BCR).
El gigante asiático ocupa apenas el 10 lugar hacia donde se dirigen las producciones locales entre 50 países, un espacio que encabeza Estados Unidos y los vecinos centroamericanos.
La gran afluencia de productos chinos, de todas las gamas, se encuentran presentes hoy en diversos rincones desde el Centro Histórico de San Salvador, hasta Santa Elena y en la cercana Santa Tecla, en el departamento La Libertad.
De China llegan vehículos, equipo tecnológico, juguetes, maquinaria para la industria, abonos, plástico y su manufactura, bisuterías, hierro, entre otras materias primas clave en los procesos de producción o para el consumo, los cuales inundan el mercado salvadoreño con ofertas de precios a veces insuperables.
El surgimiento de negocios chinos tiene lugar con el reordenamiento del Centro Histórico que realiza la Alcaldía de San Salvador Centro, que también permitió el ingreso reconocidas marcas como Hotel Cardedeu, McDonald’s, LlaoLlao, Mike Mike, Starbucks, entre otras, según reseñan medios locales.
Cada negocio chino busca un distintivo en sus productos, algunos se dedican más a la comercialización de papelería mientras que otros se ubican en edificios de hasta tres niveles donde ofrecen desde ropa interior hasta equipos grandes de limpieza, indicó un informe del diario El Mundo.
Las estadísticas del BCR precisan que la inversión china representó 12 por ciento de los 387.4 millones acumulados al tercer trimestre de 2024.
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