La caravana, compuesta por tres vehículos, contaba con los permisos de las autoridades israelíes para moverse dentro del territorio, pero fue alcanzada por más de una decena de balas, explicó el PMA.
“Fue objeto de fuego hostil a pesar de haber recibido todos los permisos necesarios”, remarcó la institución en un comunicado.
La embestida ocurrió la víspera cerca del puesto de control de Wadi, pero ningún miembro del personal del PMA resultó herido, abundó la fuente.
“Este suceso inaceptable es sólo el último ejemplo del complejo y peligroso entorno de trabajo en el que el PMA y otros organismos operan hoy en día”, apuntó la institución, cuyas evaluaciones subrayan el deterioro de la situación humanitaria en los territorios palestinos ocupados por Israel.
Por su parte, la Agencia de la ONU para los Refugiados Palestinos (Unrwa) informó que al menos siete bebés fallecieron en Gaza a causa del frío y la falta de albergue, es decir, debido a factores adicionales más allá de los efectos de la guerra.
Además, indicó, es de esperar que las condiciones climáticas sigan cobrándose la vida de más niños.
Actualmente, unos siete mil 700 recién nacidos carecen de los cuidados necesarios para sobrevivir, alertó Unrwa.
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