En un comunicado emitido por la cancillería esta tarde, las autoridades paraguayas exigieron al embajador Ricardo Capella y al personal diplomático venezolano en Paraguay, que abandonen el país en un plazo de 48 horas.
Sin embargo, este día, ya el gobierno de Venezuela había decidido romper relaciones con este país y proceder al retiro inmediato de su personal diplomático acreditado en Asunción, en el ejercicio pleno de su soberanía.
Y es que, la víspera, el presidente Santiago Peña dialogó vía telemática con el excandidato presidencial Edmundo González, a quien le ratificó su apoyo ‘como vencedor’ de las elecciones del 28 de julio último, y con la líder opositora María Corina Machado.
Venezuela considera que el presidente Peña ignoró el derecho internacional y el principio de no intervención en los asuntos internos de los países, anunció un comunicado de la Cancillería bolivariana.
En el texto, rechazó de manera categórica las declaraciones del mandatario paraguayo y afirmó que Peña ‘reincide en una práctica fracasada que recuerda las fantasías políticas del extinto Grupo de Lima con su ridícula aventura llamada (Juan) Guaidó’.
Esas acciones representan una reedición de estrategias sin sustento político, jurídico ni social, que han demostrado su rotundo fracaso, remarcó.
‘Es lamentable que gobiernos como el de Paraguay sigan subordinando su política exterior a los intereses de potencias extranjeras, promoviendo agendas destinadas a socavar los principios democráticos y la voluntad de los pueblos libres’, expresó el Ministerio para Relaciones Exteriores.
La República Bolivariana de Venezuela reiteró su compromiso con la defensa de la democracia, la paz y la autodeterminación de los pueblos, principios esenciales de la Carta de las Naciones Unidas, aseveró.
Reafirmó asimismo que ‘ninguna bufonada instruida desde el fascismo internacional logrará doblegar la voluntad de un pueblo firme en la construcción de su propio destino’.
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