Detalló por medio de un comunicado, que la anterior cifra comprende los incidentes ocurridos durante el período comprendido entre el 27 de noviembre y el 5 de enero.
Puntualizó que entre las víctimas mortales hay ocho niños y una mujer, además 48 heridos, incluidos 19 menores.
Estas bombas constituyen una muerte diferida para los sirios y un peligro a largo plazo que amenaza vidas, denunció.
Añadió que sus equipos identificaron 117 campos minados y puntos contaminados en las gobernaciones de Alepo, Idlib, Hama, Latakia y Deir Ezzor.
Del 1 de diciembre al 3 de enero, los equipos de defensa civil destruyeron 822 municiones diversas, la mayoría bombas de racimo, e identificaron más de 80 puntos contaminados con municiones sin detonar.
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