Al inicio de una sesión ministerial, el primer ministro insistió en la urgencia de responder a la convocatoria del legislativo de pasado mañana, para terminar la crisis de vacantes y pasar a reorganizar las instituciones estatales.
La autoridad enfatizó en la importancia de designar al jefe de Estado cuando restan 20 días del período estipulado en el acuerdo de alto al fuego que fija la retirada del enemigo israelí y el fortalecimiento del despliegue del ejército en el sur de la nación.
Respecto a la reunión con el enviado estadounidense Amos Hochstein, Mikati indicó que en las próximas tres semanas se producirá una retirada israelí completamente de todas las zonas en las que penetró durante la tregua.
En este sentido, el titular del Ejecutivo señaló que en la última semana los israelíes abandonaron un tercio de los terrenos ocupados en el sur, es decir, todo el sector occidental, y queda trabajo para la salida de los lados central y oriental.
La máxima figura del gabinete reafirmó el cumplimiento y la implementación literal y completa de las disposiciones de la Resolución 1701 del Consejo de Seguridad.
A su vez, obligó al ente israelí de manera precisa y franca a respetar la disposición de la ONU inmediata, lejos de maniobrar y fabricar pretextos para evadir la implementación e inventar escenarios que amenacen nuevamente el cese de hostilidades.
En su intervención, el primer ministro reiteró la responsabilidad del Comité Internacional de Seguimiento para alcanzar las etapas del acuerdo de alto al fuego y poner fin al estado de guerra.
«Con la elección de un nuevo presidente de la República, habremos reconstruido puentes entre los libaneses, y en todas mis reuniones con líderes y jefes de Estado sentí una profunda comprensión y una franca solidaridad con la posición libanesa y el derecho a la estabilidad», expresó.
En la primera sesión del gobierno en el nuevo año, Mikati deseó a los residentes libaneses y en el extranjero un 2025 de paz y estabilidad.
También, abogó por el restablecimiento del orden en la situación económica y encontrar soluciones justas a todos los problemas que enfrentan los ciudadanos.
Después de más de dos años de vacancia presidencial, Líbano intentará nombrar este jueves al jefe de Estado número 14 después de la independencia, en medio de las repercusiones de un año de agresión israelí y la continuidad de discrepancias políticas internas e injerencia extranjera.
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