«Nos ha dejado en la memoria histórica de nuestra Nicaragua, nuestro sentimiento de orgullo creativo, artístico, de lo que somos como música, como arte, como literatura, como danza, de lo que somos los nicaragüenses por gracia de Dios», expresó la vicepresidenta Rosario Murillo.
En medios de prensa del poder ciudadano, la dirigente sandinista añadió que desde las 14:00, hora local, de este miércoles, realizarán guardia de honor con las actividades culturales del departamento, y las autoridades nacionales de cultura y creatividad.
El Instituto de las Culturas de Pueblos y Juventudes también lamentó la muerte del violinista y expresó condolencias y solidaridad a su familia y al gremio de la música en Nicaragua.
Oriundo de la comunidad Las Lajas en Achuapa, León, a Hernández se le conoce por la famosa polka “El grito del Bolo”, un emblema de la música campesina nicaragüense, según refiere el portal web El 19.
De acuerdo con la publicación, con 92 años de trayectoria artística, Hernández, quien fue autor de más de 60 piezas musicales entre vals, mazurcas, polkas, corridos y zapateados norteños, deja un legado invaluable en la música de esta nación centroamericana.
Entre los temas musicales sobresale “La rompe Caite”, “La Melindrosa”, “La Guayleña (zapateado)”, “La Renqueadita” (corrido), “El Apasionado” (Vals) y “La Campesina” (Mazurca), entre otras.
arc/ybv
