Los cuerpos aparecieron anoche durante una inspección de mantenimiento posterior al vuelo, que aterrizó en el Aeropuerto Internacional de Fort Lauderdale-Hollywood, informó la compañía aérea este martes.
Se desconocen sus identidades, añadió la empresa, y “las circunstancias que rodean cómo accedieron a la aeronave siguen bajo investigación”.
JetBlue explicó que la aeronave operó recientemente el vuelo 1801 desde el Aeropuerto Internacional John F. Kennedy, en Nueva York, y llegó a su destino a 11:10 p.m., hora local, del 6 de enero, de acuerdo con el rastreador en línea FlightAware.
El macabro descubrimiento ocurre apenas dos semanas después de que se encontrara un cuerpo en el compartimento de las ruedas de un vuelo de United Airlines de Chicago a Maui, Hawái.
La Administración Federal de Aviación advirtió que el compartimento del tren de aterrizaje suele ser utilizado por polizones que desafían las condiciones peligrosas porque no se percatan del poco espacio disponible cuando ese mecanismo está retraído.
Lamentablemente, los polizones que no son aplastados suelen acabar perdiendo el conocimiento por falta de oxígeno o por congelamiento.
Además, otros incidentes marcaron los últimos tiempos en terminales aéreas: justo durante las celebraciones de Acción de Gracias una mujer logró burlar los controles, abordó un avión de Delta y viajó desde el Kennedy, de Nueva York, a París antes de su arresto y devolución a Estados Unidos, donde enfrenta a la justicia.
Semanas después, también un polizón trató de esconderse en un vuelo igualmente de Delta, que salía del Aeropuerto Internacional de Seattle-Tacoma, y fue aprehendido mientras el avión se dirigía a Honolulu.
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