Hasta este inicio de 2025 el llamado Pulgarcito de las Américas es la única nación centroamericana donde no se incrementó la cantidad de dinero mínima que se paga a un trabajador, y eso, pese a que hay proclamas de avances en la economía, muestra todo lo contrario.
El actual gobierno incrementó la cifra del salario mínimo en agosto de 2021, mientras en las naciones vecinas, desde entonces, se dieron incrementos de hasta un 43 por ciento.
Entre los que están más afectados se encuentran los recolectores de café que devengan 243.45 dólares al mes, algo que no alcanza en un país donde, por ejemplo, el precio de la canasta básica subió en tres años.
Por ley en el país se debe incrementar el salario mínimo cada tres años, algo que hace un equipo integrado por representantes del Gobierno, los patronos y los trabajadores, pero estos no se ven las caras desde agosto de 2022, y no fue necesariamente para subir los pagos.
Expertos como el economista Otto Rodríguez estiman que en la ausencia del incremento inciden varios factores, entre ellos, que el país cuente con una economía dolarizada, que esta sea la a economía más precaria de la región y el poco crecimiento.
Comentaristas estiman, viendo esta situación, que el problema se dilatará en 2025 si se considera que el Fondo Monetario Internacional (FMI) exigió al gobierno para concretar un préstamo, un ajuste fiscal, por lo que se descarta se utilicen recursos para estos fines.
Es probable, que ese ajuste sea parte de la “medicina amarga” que anunció el presidente Nayib Bukele para mejorar la economía del país.
Con el salario mínimo existente hoy, son pocos los salvadoreños que pueden sobrevivir, algo que muchos hacen gracias a remesas que reciben del exterior y que se utilizan fundamentalmente para el consumo de alimentos, pago de vivienda y otros servicios.
Por otra parte, algunos expertos y directivos como Danilo Pérez, del Centro para la Defensa del Consumidor (CDC), y Rodríguez, exvicepresidente del Banco Central de la Reserva (BCR), estiman que para una correcta canasta básica un ciudadano necesitaría al menos 500 dólares mensuales.
En general el panorama no es nada halagüeño, pues la deuda pública del país ya llegó a 32 mil 53 millones de dólares, y puede incrementarse con recursos que no necesariamente se destinarán a aumentar el salario básico.
ro/lb