La Oficina de Coordinación de Asuntos Humanitarios de la ONU (OCHA) refirió que entre el 1 y el 3 de enero de 2025, los intensos combates en el territorio de Masisi, en la provincia de Kivu Norte, provocaron que alrededor de 102 mil personas abandonaran sus hogares en busca de zonas seguras.
Desde el inicio del año los rebeldes del M23 iniciaron una ofensiva que les permitió ocupar varias comunidades del territorio de Masisi, incluida la ciudad capital, la cual quedó bajo su control el pasado 4 de enero.
Estos enfrentamientos provocaron la muerte de al menos siete civiles, según un comunicado de la representante especial del secretario general de Naciones Unidas en la RDC, Bintou Keita, quien condenó la ofensiva del grupo armado y la ocupación de la ciudad de Masisi.
La víspera el Ejército congoleño recuperó este enclave fundamental, pero los combates persisten y las personas continúan huyendo de la violencia.
Según la OCHA, hasta el 30 de noviembre de 2024 se registraron más de 600 mil desplazados en ese territorio, por lo que esta nueva ola genera una gran preocupación, dada la precaria situación en la que viven los refugiados.
A pesar de la inseguridad, los actores humanitarios siguen activos y se preparan para la reanudación de sus actividades, reportó Radio Okapi.
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