La Ministra de Asuntos de la Mujer, Mona Al-Khalili, criticó la decisión y reclamó una investigación sobre las agresiones cometidas contra los prisioneros palestinos.
En octubre del pasado año, Al-Khalili presentó una solicitud formal a Patten para visitar Palestina e investigar el asunto, pero esta semana Israel anunció su rechazo a la entrada de la funcionaria.
La decisión demuestra el alcance de las graves violaciones de los derechos humanos, incluida la violencia sexual y de género, contra los detenidos palestinos, afirmó la ministra.
En los últimos meses varios reportes de agencias de la ONU y ONG denunciaron los maltratos y vejaciones a los que son sometidos los prisioneros palestinos en las cárceles del vecino país. Ante la situación, Al-Khalili instó a la comunidad internacional a ejercer más presión sobre el gobierno de Benjamin Netanyahu para obligarlo a revocar su decisión.
Las autoridades israelíes tienen la obligación de permitir inmediatamente el acceso de organismos independientes de investigación y supervisión a todas las prisiones y lugares de detención, subrayó.
Según datos oficiales, unos 10 mil 400 palestinos continúan encerrados en centros penitenciarios de esa nación.
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