El diario La Nación y la agencia IP destacan que unos 45 bomberos, provenientes de las regiones de Cordillera y Central, se unieron para combatir las llamas, que no causaron intencionalmente cazadores furtivos habituales de la zona, donde habitan capibaras, lagartos y otras especies.

La Dirección de Defensa Animal de Paraguay confirmó que los guardaparques trabajan en el rescate de animales en peligro, los cuales serán reinsertados en su hábitat natural una vez recuperados.

Aunque inicialmente se identificaron tres focos de incendio, fuentes especializadas del país sudamericano afirmaron que el viento complicó las acciones de control.

Los fuegos en áreas forestales constituyen actualmente un problema frecuente, que el gobierno de Paraguay atribuye en parte al cambio climático y a la deforestación, pero también a la acción del hombre.

A propósito, el Ministerio Público de la nación abrió una investigación criminal para dar con el paradero de quienes provocaron los incendios forestales del fin de semana anterior, que afectaron más de 40 hectáreas de suelo en la reserva ecológica Banco San Miguel, ubicada en orillas de la Costanera Norte de Asunción.

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