Los problemas comenzaron cuando una revista nacional reveló que una estrella de Fuji TV abusó sexualmente de una presentadora de la cadena durante una cena organizada por la compañía para sus empleados.
El nombre del agresor causó revuelo de inmediato por su popularidad, pues Masahiro Nakai es antiguo miembro de la famosa banda masculina SMAP, y él mismo reconoció en su sitio web oficial haber llegado a un acuerdo con una mujer por un problema.
Con tal de eludir represalias legales, Nakai llegó a un acuerdo extrajudicial para compensar a la mujer con 90 millones de yenes, equivalente a alrededor de 560 mil dólares.
Por su parte, Fuji TV niega haber participado en la organización de la cena y al verse acusada por otros medios de que un empleado suyo jugó un papel en el incidente entre Nakai y la presentadora, decidió iniciar una investigación con abogados externos.
Las críticas no se han detenido porque los programas donde aparecía Nakai continuaron transmitiéndose incluso después de divulgarse el problema.
El asunto podría costarle el puesto a algún que otro ejecutivo de la compañía, que este lunes reunió a todos sus funcionarios para debatir el asunto.
A raíz del escándalo, varias empresas japonesas de renombre y extranjeras presentes en Japón anunciaron la suspensión de sus anuncios publicitarios en la cadena de televisión Fuji TV.
Entre las entidades que cancelaron sus contratos de patrocinio aparecen Toyota, Nissan, 7-Eleven, McDonalds, 24h Lawson, NTT, Nippon Life y Kao, esta última reconocida corporación de productos de belleza.
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