La deuda política es el dinero público que reciben los partidos que participan en elecciones, contemplada en el artículo 210 de la Constitución de la República.
El artículo 210 de la Constitución establece: “El Estado reconoce la deuda política como un mecanismo de financiamiento para los partidos políticos contendientes, encaminado a promover su libertad e independencia”.
“Vamos a eliminar la deuda política porque eso es lo que el pueblo salvadoreño quiere, y trabajamos para eso. Con acciones concretas hemos demostrado que desde que vinimos comenzamos a cambiar las cosas, y los frutos en el país se están viviendo”, señaló Ernesto Castro, presidente del parlamento y de la comisión.
Esta es la primera solicitud de reforma constitucional examinada desde que se modificó el artículo 248 de la Carta Magna, y cuya aprobación por el pleno es considerado aquí como un puro trámite dada la mayoría de 57 de 60 votos con los que cuenta el gobierno.
Según críticos de la iniciativa impulsada por el partido cian, color que identifica al partido del presidente Nayib Bukele, esta medida solo persigue perpetuarse en el poder.
Una encuesta en línea del diario La Prensa Gráfica, preguntó:¿Cómo considera la iniciativa del gobierno salvadoreño de eliminar la deuda política a partidos?, una consulta que toca un aspecto medular en la política local, el financiamiento de las campañas. Un 35 por ciento apoya la iniciativa, un 48 no la acepta y apenas 16 por ciento respondió que le da igual.
Algunos críticos consideran que la eliminación abrirá las campañas políticas a la entrada del financiamiento de fuentes “oscuras” e incluso vinculadas al narcotráfico.
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