Las cifras oficiales de este jueves ofrecen cierto respiro a la sombría perspectiva económica de las islas británicas.

Los economistas encuestados pronosticaron que el producto interno bruto (PIB) británico se contraería 0,1 por ciento, aunque en la realidad se favoreció de un crecimiento mayor de lo esperado, de 0,4 por ciento, en diciembre.

En el conjunto de 2024, el PIB total creció 0,9 por ciento, tras un crecimiento del 0,4 en 2023. Sin embargo, ajustado por el aumento de la población, el producto nacional per cápita cayó 0,1 por ciento el año pasado, lo que pone de manifiesto la presión actual sobre el nivel de vida y las finanzas públicas.

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