El jefe de Estado congoleño, quien se encuentra en Alemania para participar en la Conferencia de Seguridad de Múnich, conversó en esta jornada con el enviado especial del presidente estadounidense, Donald Trump, encargado de misiones específicas, Richard Grenell.
Según la Presidencia congoleña, Tshisekedi acogió con satisfacción los debates constructivos sobre la paz, la seguridad y la estabilidad en la Región de los Grandes Lagos.
Igualmente dialogó con el vice primer ministro y titular de Asuntos Exteriores y Cooperación al Desarrollo de Bélgica, Maxime Prévot, quien trabaja para promover la condena a Ruanda en el Parlamento Europeo por la agresión a la RDC.
Prévot reiteró su apoyo al presidente Félix Tshisekedi, condenó claramente la invasión de Ruanda y pidió sanciones contra el régimen de Kigali, señaló la Presidencia congoleña en la red social X.
“Creo que deberíamos poder prever una amplia gama de acciones y sanciones”, dijo, y agregó que al estar al frente de la cooperación al desarrollo, cree que es posible analizar hasta qué punto también los países europeos deberían poner fin al programa de cooperación con Ruanda.
Remarcó que Bélgica lleva mucho tiempo condenando la posición de Kigali en el conflicto en el este de la RDC, donde se le considera responsables por apoyar al grupo armado Movimiento 23 de Marzo (M23).
“Procuraré que más allá de la indignación en palabras, también podamos combinar acciones con gestos concretos. También pediré una reacción más contundente, que se centre en medidas concretas, como la suspensión de una serie de acuerdos que nosotros, los europeos, tenemos con Ruanda”, comentó.
Agregó que lo que sucede en el este de la RDC no puede dejar a la comunidad internacional indiferente.
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