«Sin duda alguna, informaremos los resultados a nuestros amigos en el marco del grupo», aseguró el líder ruso, y añadió que Moscú está al tanto del interés de la agrupación en «normalizar las relaciones ruso-ucranianas y poner fin a las hostilidades» y trata con respeto las iniciativas correspondientes.

La víspera, la ciudad saudita de Riad acogió las consultas entre Rusia y Estados Unidos, primeras negociaciones bilaterales de alto nivel desde hace mucho tiempo.

Según el ministro de Asuntos Exteriores ruso, Serguéi Lavrov, las partes se comprometieron a crear las condiciones para una completa restauración de la cooperación de Moscú y Washington y expandirla a nuevas áreas de interés mutuo.

En particular, se acordó eliminar mutuamente las restricciones al trabajo de las embajadas y otras instituciones y formar grupos de trabajo de alto nivel para negociar una rápida solución al conflicto ucraniano.

La Cancillería rusa informó, por su parte, que se convino en reanudar la comunicación sobre una serie de temas internacionales, teniendo en cuenta la responsabilidad de Rusia y Estados Unidos como potencias nucleares.

La reunión en Riad se celebró por instrucciones de Putin y su homólogo estadounidense, Donald Trump, y se dedicó asimismo a concertar un encuentro en persona entre los dos mandatarios.

Rusia estuvo representada en la mesa de negociaciones por Lavrov y el asesor del Kremlin Yuri Ushakov. Por la parte estadounidense, participaron el secretario de Estado, Marco Rubio, el asesor de seguridad nacional, Mike Waltz, y el enviado especial para Oriente Medio, Steve Witkoff.

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