El programa trabaja para ayudar al nuevo gobierno sirio en el proceso de rehabilitación y reconstrucción de las casas que quedaron completamente destruidas o gravemente dañadas, aseguró Al-Ali citados por el canal Syria TV.

Destacó que Siria había perdido alrededor del 25 por ciento de su sector de viviendas debido a la guerra y expresó su optimismo sobre el desarrollo urbano después de mantener conversaciones con los funcionarios en Damasco.

Hay posibilidad de atraer buena financiación de los donantes y existen proyectos propuestos en Alepo, Damasco, Hama e Idlib, puntualizó el funcionario.

Respecto al costo de la reconstrucción, Al-Ali dijo que las estimaciones oscilan entre 400 y 500 mil millones de dólares, y señaló la necesidad de actualizar estas estimaciones de acuerdo a los precios actuales y la magnitud de la nueva destrucción.

Destacó que el Programa trabaja actualmente en la ampliación de sus alianzas, con especial atención a la rehabilitación de agua, electricidad, saneamiento, carreteras, residuos sólidos y viviendas para garantizar una recuperación y reconstrucción sostenibles.

Sobre las condiciones de los desplazados en los campamentos, confirmó que hay esfuerzos para brindarles viviendas alternativas y devolverlos a sus ciudades y pueblos, pero destacó que existen grandes obstáculos, entre ellos la continuidad de las sanciones internacionales que obstaculizan las transferencias financieras, lo que dificulta la financiación de proyectos de rehabilitación.

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