El pronunciamiento afirma que “el gobierno de derecha deja un Uruguay más desigual, con pérdida de soberanía y deterioro democrático”.

Denuncia que en los últimos meses se perdieron o están en riesgo más de cuatro mil puestos de trabajo y hay 16 conflictos laborales, en su mayoría provocados por “intransigencia de las patronales”.

En tal contexto el PCU compromete su esfuerzo para construir un gobierno del FA «que desde las políticas públicas desmonte el modelo de la desigualdad que implementó la derecha”.

Señala que ello no depende solo de políticas públicas.

Es el pueblo organizado el sujeto de la transformación social. Es imprescindible el fortalecimiento del bloque histórico político y social, democrático y radical de los cambios y de todas las herramientas unitarias populares, señala la declaración.

Insta a cumplir con el programa del Frente para conseguir una Estrategia Nacional de Desarrollo.

El documento refiere prioridades como la erradicación de la pobreza, con énfasis en las infancias y adolescencias. También el aumento del salario real, en especial los más bajos y la ampliación de la negociación colectiva. La reducción de la jornada laboral.

Menciona el diálogo de la seguridad social para una reforma integral que recupere el derecho de jubilación a los 60 años, jubilaciones mínimas equiparadas al salario mínimo y eliminación de privilegios a empresas que manejan los fondos de pensiones y retiros.

El PCU convocó a su XXXIII congreso, cuyas tareas preparatorias comenzarán en breve.

La declaración consigna una situación internacional y regional compleja, y considera como imperativos la defensa de la paz, el antimperialismo, la solidaridad con los pueblos, en particular con Cuba y el trabajo por la unidad latinoamericana.

mem/ool