Al recibir a la embajadora de Estados Unidos en Beirut, Lisa Johnson, el titular libanés describió la estrategia agrícola con el objetivo de impulsar la producción y mejorar la calidad.
Hani también destacó la urgencia de rehabilitar las tierras dañadas por las agresiones israelíes y ampliar los programas de apoyo a los agricultores para impulsar el desarrollo sostenible.
Por su parte, la embajadora Johnson resaltó el papel del sector en la seguridad alimentaria, particularmente en cultivos esenciales, y elogió los esfuerzos del ministerio.
Además, confirmó que los programas de la USAID en Líbano están en gran parte suspendidos y actualmente no hay apoyo estadounidense directo disponible para el desarrollo, incluida la agricultura.
Datos oficiales revelaron a inicios de febrero que casi 37 mil agricultores reportaron pérdidas en Líbano debido a la agresión israelí, y el 80 por ciento del daño agrícola ocurrió en el sur.
El reporte, aprobado por el gobierno en coordinación con agencias de la ONU, cooperativas, instituciones, los municipios y el Ejército, indicó que algunas de las vastas tierras de cultivo destruidas necesitan años para recuperarse como consecuencia del uso de armas prohibidas y requieren una gran descontaminación.
Un informe del Banco Mundial de noviembre último estimó los daños en 124 millones de dólares entre el 27 de septiembre y mediados de octubre de 2024, pero el Ministerio de Agricultura cree que la cifra real es significativamente mayor, aunque es difícil de cuantificar con precisión en esta etapa.
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