En su mensaje, la mandataria reconoció la necesidad de construir un mundo más justo y con respeto a la igualdad y se pronunció contra la violencia contra las mujeres.
Pidió que las mujeres sumen sus voces, trabajo y esfuerzos por igualdad, libertad, democracia y por una patria próspera desarrollada y unida, según dijo.
La mandataria omitió referencias al proyecto oficial de fusionar el Ministerio de la Mujer junto a otra cartera, lo cual rechazan extitulares de ese organismo de diversas posiciones y organizaciones de defensa de los derechos del sector femenino de la población.
La ministra de la Mujer, Fanny Montellanos, aseguró que el enfoque de género (que rechazan los conservadores) se mantendrá de concretarse el proyecto de fusionar el citado ministerio con el de Desarrollo e Inclusión Social.
Durante la jornada, por otra parte, miles de mujeres marcharon en demanda de respeto a sus derechos y conquistas que consideran amenazados por una ofensiva conservadora.
Tal arremetida es impulsada por congresistas de derecha extrema, como Milagros Jáuregui, predicadora evangélica según la cual la mujer debe servir a su hombre y los homosexuales se comportan como animales.
Al anochecer, la Policía impidió con el uso de la fuerza el ingreso de la marcha que llegó a la céntrica Plaza San Martín, prohibida para protestas por el alcalde de Lima, Rafael López-Aliaga, también de derecha extrema.
De otro lado, la ministra Montellanos señaló la gravedad de la violencia contra las mujeres y recordó que en los últimos tres años hubo 450 feminicidios y la estadística oficial precisó que en 2024 se registraron 170 crímenes de ese tipo y en enero último 17.
Iniciativas parlamentarias conservadoras pretenden retirar el concepto de feminicidio, que conlleva agravantes, en el código penal, y cambiarlo por el de asesinato solo de un cónyuge o expareja y eliminando el de homicidio como resultado de acoso o el cometido por pretendientes despechados o violadores.
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