Ese es el clamor que se siente sobre hechos que conmocionaron al mundo como el asesinato de monseñor Arnulfo Romero, la masacre del Mozote, del padre Rutilio Grande, la de cuatro periodistas holandeses, por solo citar algunas de todas las permanecen impunes y sin que las autoridades respondan a las exigencias de justicia.
La víspera, el arzobispo de San Salvador, José Luis Escobar Alas, reprochó que todos los casos de asesinatos de sacerdotes, religiosas, laicos y catequistas de la Iglesia Católica siguen en la impunidad y que no hay justicia para ellos.
Las declaraciones ocurrieron durante los actos de conmemoración y la misa en honor al martirio del padre Rutilio Grande y sus acompañantes supuestamente, por un escuadrón de la muerte vinculado a las fuerzas militares.
Se cumplieron 48 años desde el asesinato de los beatos salvadoreños, el padre Grande, Manuel Solórzano y Nelson Rutilio Lemus, y que nada se sabe de los autores
No se sabe nada de los asesinos, nada. San Óscar le exigió al gobierno que aclarara este punto. Y ninguno de los asesinatos de todos los sacerdotes, las religiosos, los laicos, los catequistas, ninguno se ha aclarado. Quedan impunes, tristemente, no hay justicia, no hay verdad, dijo el arzobispo salvadoreño.
El padre Grande y sus dos acompañantes que viajaban en un jeep tipo safari hacia El Paisnal, al norte de San Salvador, donde el sacerdote oficiaría una misa fueron ametrallados la en tarde del 12 de marzo de 1977.
Las pesquisas determinaron que el prelado recibió 19 impactos de bala, calibre 12, tipo “doble cero”, un proyectil blindado de uso militar. El asesinato fue atribuido a escuadrones de la muerte, y la iglesia concluyó que fue odio a la fe, pero no hay nombres de responsables.
Con la misma impunidad se mantiene el caso de los seis sacerdotes jesuitas y sus dos colaboradoras que fueron asesinados en la Universidad Centroamericana José Simeón Cañas (UCA), el 16 de noviembre de 1989, durante la ofensiva final.
En noviembre de2024, un juzgado envió a juicio a varios militares retirados, además del expresidente Alfredo Cristiani, y del exdiputado Rodolfo Parker pero este proceso como los otros se dilata y se mantiene sin solución.
En los próximos días se conmemorará el 43 aniversario de la masacre de cuatro periodistas holandeses y aun la justicia no ve la luz pese a que están identificados los altos mandos militares que participaron en los hechos.
Sin embargo, la impunidad se enseñorea en el país mientras familiares y victimas claman por la justicia.
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