El desembales de proyectos para echar al ministro respondió a la indignación general por el asesinato del popular cantante de cumbia Paul Flores, cuyos autores son buscados por la Policía.

La primera moción fue presentada por la parlamentaria Susel Paredes, secundada mayoritariamente por colegas de izquierda y centro y fue suscrita por 37 de los 130 legisladores, tras mantenerse durante semanas sin poder ser presentada, porque le faltaba una firma de cifra requerida para su debate.

Posteriormente se presentaron una moción con 33 firmas elaborada por el legislador de izquierda Jaime Quito y otra del neoliberal Diego Bazán, cuyo partido aseguró que reunía firmas sin hacerlo público desde el mes pasado.

Por su parte, la congresista Patricia Juárez, de la bancada neoliberal Fuerza Popular (FP) anunció que está casi lista su moción por la censura a Santiváñez y dijo que es posible que las mociones se debatan y voten los proyectos el martes próximo.

Por su parte, el Partido Perú Libre, que comparte la mesa directiva parlamentaria con fuerzas derechistas y hasta hoy no había firmado ninguna iniciativa de censura, anunció que ha decidido votar por la defenestración de Santiváñez.

Entretanto, periodistas y analistas calificaron como hipocresía a los partidos neoliberales y derechistas porque mantuvieron con su oposición a anteriores intentos de censura al ministro y solo se decidieron a retirarle su apoyo ante la indignación causada por el asesinato del cantante Paul Flores.

El todavía titilar pareció aceptar anoche la posibilidad de ser censurado, al declarar a la televisora de derecha extrema Willax que quiere exponer al pleno congresal la labor cumplida y que después, “Si existe algún tipo de decisión, estoy absolutamente convencido que saldré con la frente en alto”.

Santiváñez es considerado en todas las mociones como responsable del agravamiento de la inseguridad ciudadana y el desborde del crimen organizado, mientras una encuesta de la empresa Datum difundida hoy indicó que 79 por ciento desaprueba su gestión y solo 9, 0 por ciento la aprueba.

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