El estudio, realizado vía digital entre el 9 y el 12 de marzo a una muestra de mil 500 personas, arrojó que González cuenta con un 52,9 por ciento de apoyo, mientras su rival, el mandatario aspirante a la reelección, Daniel Noboa, tiene el 45,2 por ciento.
Ante la pregunta de quién genera más confianza, la representante de la RC supera al actual gobernante en los temas consultados: economía, oportunidades, seguridad, integración internacional, transparencia.
Además, el sondeo reveló que el 53,1 por ciento de los encuestados nunca votaría por Noboa frente al 41,5 por ciento que nunca lo haría por González.
Si bien las encuestas no han demostrado en Ecuador ser fieles a la realidad en los más recientes procesos electorales, diversos sectores sociales, campesinos, indígenas, artistas e intelectuales, han expresado su respaldo a la candidata del correísmo, en quien buscan una alternativa de cambio frente al modelo de la derecha.
La semana pasada, González aceptó dialogar sobre las demandas de una Asamblea Popular Plurinacional donde diversas organizaciones del campo popular descartaron respaldar a Noboa.
El titular de la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (Conaie), Leonidas Iza, leyó la serie de demandas y manifestó la necesidad de consolidar la unidad para enfrentar al proyecto neoliberal, fascista y de derecha.
La representante de la RC agradeció el apoyo expresado por la Conaie y el resto de los colectivos sociales en su cuenta de X, donde aseguró que “el camino de la unidad es el que recorreremos juntos por la vida de nuestra nación”.
La candidata expresó que la unidad anhelada entre los sectores progresistas y de izquierda no son para ganar una elección, sino “para construir un país que se cae a pedazos, para levantar una Patria y para gobernar en equipo».
El domingo 13 de abril más 13,4 millones de ecuatorianos están convocados a las urnas a elegir presidente entre Noboa y González, que proponen dos proyectos política, económica y socialmente antagónicos.
El próximo domingo 23 de marzo ambos contendientes se verán frente a frente en el debate presidencial en el que deberán exponer sus propuestas sobre educación, salud y seguridad social, criminalidad y seguridad, economía y empleo, así como gobernabilidad.
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