Mediante un comunicado, la institución explicó además que el máximo jefe de esa prisión, ubicada en el municipio capitalino de Fraijanes, incurrió en otro delito: incumplimiento de deberes, al colaborar con integrantes de la pandilla Mara Salvatrucha.

Fuentes del Ministerio de Gobernación, citadas por Emisoras Unidas, revelaron que tienen documentación que vincularía al funcionario con miembros de ese grupo, a quienes, supuestamente, se les dio beneficios dentro del penal, a cambio de dinero.

Entre algunas de las situaciones denunciadas expuso la construcción de viviendas con finos acabados, algunas de las cuales se encontrarían en estado de obra gris.

El SP descartó que estas obras fueran autorizadas y sospecha que los materiales prefabricados ingresaron al penal con la colaboración de guardias de Pavoncito.

Esta es la segunda denuncia contra un director de esa granja penal, luego que el 20 de noviembre pasado presentaron una contra el anterior, por supuestamente permitir la construcción de apartamentos de dos niveles para cabecillas de esa pandilla en esa cárcel.

Cinco días después, el titular de Gobernación del país, Francisco Jiménez, anunció la destitución de las autoridades penitenciarias involucradas.

La Policía Nacional Civil realizó, junto al SP, a fines de enero último un operativo a gran escala en esa prisión para identificar y trasladar a 17 privados de libertad a la de máxima seguridad Renovación I, en el occidental departamento de Escuintla.

El ministro del Interior expresó antes que por primera vez en la historia de la nación un Gobierno decidió enfrentar de lleno la crisis en las cárceles, origen, entre otros delitos, de extorsiones a ciudadanos y comerciantes.

Durante 2024, en el primer año de la nueva gestión de ese organismo, se realizaron cerca de 200 requisas en diferentes centros cancelarios de Guatemala, con resultados de escándalo.

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