Al condenar el ciclo de violencia actual, el jefe de Estado destacó que las agresiones de Tel Aviv socavan directamente el proyecto de recuperación nacional que todos los libaneses abrazan colectivamente.
El mandatario llamó a todas las partes interesadas en el sur, en particular al Comité de Seguimiento del acuerdo de noviembre de 2024 y al Ejército libanés, para seguir los acontecimientos y evitar cualquier escalada o brechas de seguridad que puedan amenazar al país.
De acuerdo con la Presidencia Libanesa, Aoun ordenó al comandante del Ejército implementar todas las medidas de campo necesarias para proteger a los civiles y realizar una investigación exhaustiva del incidente en el sur del país.
El primer ministro Nawaf Salam advirtió sobre la renovada actividad militar en la frontera sur que podría arrastrar al país a una nueva guerra devastadora.
La máxima figura del gobierno instó a Naciones Unidas a intensificar la presión internacional sobre Israel para lograr su retirada del territorio libanés ocupado, al considerar su presencia una violación de la Resolución 1701 y de los acuerdos de alto al fuego.
El líder del Ejecutivo recalcó la necesidad de medidas militares y de seguridad para reafirmar que solo el Estado tiene la autoridad sobre la guerra y la paz.
A través de un comunicado, el Ejército libanés anunció la realización de operaciones de barrido y búsqueda, y el hallazgo de tres lanzacohetes de fabricación casera al norte del río Litani, entre Kfar Tibnit y Arnoun, en la localidad de Nabatieh.
La institución castrense confirmó el desmantelamiento de los lanzacohetes y precisó que las unidades militares continúan tomando las medidas necesarias para controlar la situación en el sur.
En medio de este escenario, la Fuerza Provisional de las Naciones Unidas (Unifil) mostró su preocupación por la posible escalada de violencia tras la detección de cuatro proyectiles lanzados alrededor de las 07:30, hora local, desde Líbano hacia Israel en las cercanías de Metula, lo que provocó una represalia inmediata por parte de las fuerzas de Tel Aviv.
Mediante una declaración, la Unifil exigió a todas las partes evitar poner en peligro los progresos alcanzados, en especial cuando están en riesgo las vidas de civiles y la frágil estabilidad observada en los últimos meses.
Este sábado, el Ministerio de Salud reportó dos fallecidos y 10 heridos en el ataque israelí contra el poblado de Touline, mientras otra incursión en Yohmor al-Shaqif provocó lesiones a un ciudadano.
El Centro de Operaciones de Emergencia del Ministerio indicó que dos civiles heridos en Kfar Kila, debido a la agresión israelí, fueron trasladados al hospital para recibir tratamiento.
Los medios israelíes informaron que cinco misiles fueron lanzados desde Líbano contra las cercanías del asentamiento Metula, ubicada en la Alta Galilea, en el norte de los territorios ocupados.
El diario hebreo Haaretz precisó que el bombardeo de artillería contra el sur de Líbano fue una respuesta inicial a los cohetes disparados, y se espera una represalia más amplia.
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