El Ministerio de Energía y Minas informó que las fuertes lluvias provocaron la rotura del dique ubicado en una de las zonas afectadas por el derrame de más de 25 mil barriles de petróleo.
La entidad señaló que equipos de contingencia de la estatal Petroecuador y empresas de remediación «han sido activados de inmediato y se encuentran desplegados en el sitio, donde realizan labores de contención y refuerzo de barreras».
Como medidas emergentes, el comunicado señala que se han instalado siete barreras en el río Viche y se han dispuesto tractores en las playas para retirar materiales con petróleo que puedan ser arrastrados por la marea.
Como consecuencia se suspendió la captación de agua en la planta de San Mateo, que abastece del líquido vital a la capital provincial, «para prevenir la posible contaminación de hidrocarburos» y el abastecimiento a la población se garantizará mediante 50 camiones cisternas.
Además, anunció que la Armada Nacional reforzará el suministro de agua.
El pasado 13 de marzo una rotura del Sistema de Oleoductos Transecuatoriano (SOTE) provocó el derrame de 25 mil 116 barriles de petróleo que fueron hacia ríos de la provincia costera de Esmeraldas.
Ante el vertido, en ese territorio impera una emergencia ambiental que afectó la economía local, así como a la flora y la fauna, incluido un refugio natural de vida silvestre con más de 250 especies.
La crisis ambiental dejó al menos 500 mil personas sin acceso a agua potable durante casi 12 días, hubo daños en cultivos, en los ríos y en la salud de los pobladores.
La candidata presidencial Luisa González, de la Revolución Ciudadana, calificó de indignante el tratamiento que el Gobierno le ha dado al desastre y en una entrevista este miércoles cuestionó la ausencia del mandatario aspirante a la reelección, Daniel Noboa.
«No hemos visto la presentación del presidente Noboa en Esmeraldas, no hemos visto, a los tres días recién aparecieron autoridades a decir esto es un sabotaje», dijo González a una emisora local.
ro/avr