Según el diario Página 12, la escultura del reconocido intelectual, de 1,9 metros de altura, fue demolida por funcionarios de Vialidad Nacional poco después de una multitudinaria marcha en esta capital y varias provincias por el Día Nacional de la Memoria por la Verdad y la Justicia.
El hecho se sumó a otros como la retirada del cartel con el nombre del Centro Cultural Kirchner (llamado Palacio Libertad por el Gobierno de Javier Milei) y la publicación por la Casa Rosada de un video donde se niega la existencia de 30 mil detenidos desaparecidos durante la última dictadura cívico-militar en este país (1976-1983).
Bayer fue un destacado sindicalista, militante y defensor de los derechos de los pueblos originarios.
Trabajó para el diario Página 12, fue secretario general del Sindicato de Prensa de Buenos Aires (Sipreba) y escribió obras como Los vengadores de la Patagonia trágica, Los anarquistas expropiadores y otros ensayos, Fútbol argentino, Rebeldía y esperanza, Severino Di Giovanni, el idealista de la violencia y la novela Rainer y Minou.
A través de sus libros, narró y denunció el fusilamiento y desaparición por el Ejército de mil 500 obreros en huelga entre 1920 y 1922, así como otros muchos crímenes, persecuciones y hechos de corrupción.
Tras lo ocurrido, el vicegobernador de Santa Cruz, Fabián Leguizamón, expresó su repudio y afirmó que “la memoria no se destruye”.
La escultura simbolizaba no sólo su figura, sino también la resistencia, la historia y la necesidad de no repetir los errores del pasado. Su destrucción no hará retroceder nuestro compromiso con la verdad, sino que reafirma nuestra decisión de mantener vivo el recuerdo de quienes dieron su vida por una sociedad más justa, afirmó.
Además, la Secretaría de Estado de Cultura y la de Igualdad e Integración de ese territorio exigieron “la restitución inmediata del monumento retirado arbitrariamente, y su reubicación con el respeto que merece quien iluminó una de las páginas más silenciadas de nuestra historia”.
Por su parte, Sipreba resaltó el ejemplo de Bayer y aseveró que “su legado no podrá negarse nunca”.
A su vez, la Confederación de Trabajadores de la Educación (Ctera) advirtió que “este no es un hecho aislado, sino parte de una política de negacionismo y odio”.
Es un intento de borrar su legado, silenciar su denuncia contra las injusticias e imponer el olvido. Exigimos explicaciones inmediatas al Gobierno Nacional y la restitución del monumento. No permitiremos que se ataque la memoria de nuestro pueblo ni que se borren las historias que marcaron el camino de la lucha del país, indica un mensaje de esa agrupación.
Bayer dedicó su vida a investigar, escribir y visibilizar la verdad sobre la Patagonia Rebelde, el saqueo de las empresas y la represión estatal. Además, defendió los derechos de los trabajadores y los pueblos originarios, y mantuvo una relación cercana con Ctera, basada en su compromiso con la educación pública y los derechos humanos, añade.
En tanto, la agrupación Hijos, que reúne a familiares de las víctimas de la dictadura, afirmó que “quienes intentan borrarlo, lo están multiplicando”.
Asimismo, los trabajadores de Vialidad se opusieron al accionar de las autoridades del organismo.
«Son ajenos a nuestros sentimientos como trabajadores y afiliados, son ellos los exclusivos responsables de los hechos lamentables y de sus consecuencias políticas y sociales”, apuntaron en un comunicado.
Perdón al pueblo santacruceño, a los trabajadores y a la memoria de nuestros mártires por el innecesario atropello a la memoria sagrada de los asesinados y sus descendientes, añadieron.
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