Un comunicado de la principal central obrera peruana recuerda que en los últimos años han sido asesinados 26 sindicalistas, en su gran mayoría de la construcción, a manos de grupos criminales que extorsionan a empresarios y trabajadores de ese sector, cuya Federación sindical lidera también Villanueva.
El atentado se registro el 18 de marzo, pero la CGTP y Villanueva lo mantuviero fuera del conocimiento público por razones de seguridad, según fuentes sindicales.
El pronunciamiento demanda al Ministerio del Interior, la Fiscalía, el Poder Judicial y la Policía Nacional, medidas urgentes y efectivas para identificar y sancionar a los responsables del atentado.
La CGTP exige igualmente estrategias de seguridad que garanticen la vida e integridad de los dirigentes sindicales y trabajadores en general. “La impunidad solo alienta nuevos actos de violencia que atentan contra la democracia y el derecho a la organización sindical” añade, a tiempo de reafirmar su compromiso con la defensa de los derechos laborales y la lucha contra toda forma de violencia y amedrentamiento contra la clase trabajadora.
Agrega la exigencia de “una política de seguridad integral que enfrente de manera firme y decidida el accionar del crimen organizado”.
La inseguridad ciudadana es considerado el principal problema de los peruanos y a diario hay entre cinco y seis asesinatos, ante lo cual el Gobierno declaró en emergencia la capital peruana y desplegó miles de policías y militares en las calles.
Un estudio de la organización no gubernamental Redes proceso datos oficiales como el Instituto Nacional de Estadística e Informática, según el cual 27,5 por ciento de los peruanos han sufrido algún acto delictivo y dos de cada tres se sienten inseguros.
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