El director general del Servicio Nacional de Sanidad e Inocuidad Agroalimentaria (Senasa), Ángel Aguilar, comunicó que el Consejo de Ministros aprobó ampliar la emergencia, declarada en septiembre de 2024 tras detectarse los primeros brotes de la enfermedad.

La extensión de la medida nos da un respiro para poder seguir implementando todas las acciones que hasta ahora viene haciendo el Senasa, afirmó Aguilar.

El funcionario instó a los ganaderos a estar atentos al estado de sus reses y mascotas, y recordó que el gusano barrenador afecta a todos los animales de sangre caliente, y puede causar infecciones graves e incluso la muerte.

Para frenar la plaga, esta nación centroamericana inauguró en noviembre pasado en el central departamento de Comayagua el primer centro de dispersión de moscas estériles, una estrategia clave para neutralizar la propagación del parásito y proteger el sector pecuario.

Con el objetivo de contrarrestar el mal, el Ministerio de Agricultura y Ganadería aplica cuarentenas en los puntos de ingreso y vigilancia epidemiológica en áreas de riesgo, educación sanitaria masiva y un aumento en el control de inspección y movimiento de animales.

Además, incrementó la dispersión de moscas estériles, al liberar decenas de millones de ejemplares semanales en las áreas más críticas para reducir la población del gusano.

El gusano barrenador es una afección causada por las larvas de la mosca Cochliomyia hominivorax (Coquerel), que deposita sus huevos en cualquier lesión abierta de un animal de sangre caliente, incluso en las personas.

Desde 1995, Honduras no registraba en humanos casos de gusano barrenador.

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