Con cerca de 11 mil personas diagnosticadas desde el 7 de enero y 408 fallecidos, el propósito de cortar la trasmisión antes del mes de abril no se ha logrado, pues cada día se reportan más de 100 nuevos casos.
La víspera el Ministerio de Salud (Minsa) informó de 178 nuevos pacientes, en tanto permanecían ingresadas 722 personas en distintas instituciones y territorios.
La intención del Gobierno era disminuir la propagación del cólera antes de la temporada de lluvias, para lo cual movilizaron numerosos recursos y realizaron dos campañas de vacunación, con las cuales alcanzaron a más de un millón de personas.
Otras acciones desplegadas fueron la instalación de centros de tratamiento en las áreas más afectadas y la distribución medicamentos y medios para el combate de la dolencia.
También la capacitación con el personal de salud, los voluntarios y el personal de apoyo, así como la comunicación de riesgo, además del abastecimiento de agua potable, la distribución de hipoclorito, la limpieza de cisternas y tanques de agua, y la higiene de las comunidades.
Sin embargo, factores como las condiciones de vida, la pobreza, la falta de acceso a agua potable y saneamiento, entre otros, han incidido negativamente en los resultados.
El cólera ha golpeado con mayor fuerza en las comunidades más vulnerables y, lamentablemente, los menores de entre los dos y los cinco años de edad han sido los más afectados.
jha/kmg