A través de un comunicado, el Departamento de Transportes británico informó la decisión de permitir la venta de nuevos automóviles de gasolina y diésel hasta 2030.

En tanto, el comercio interno de los autos híbridos estará autorizado hasta 2035, mientras los pequeños fabricantes, como el productor de coches de lujo Aston Martin, estarán exentos de dichas regulaciones.

Al decir del Ejecutivo, la modificación al “Mandato de Vehículos de Cero Emisiones” facilitará que la industria pueda actualizarse para fabricar carros eléctricos, al tiempo que se cumple el compromiso del manifiesto de detener las ventas de nuevos automóviles de gasolina y diésel para 2030.

El amplio paquete de medidas desvelado hoy también eximirá del mandato a los fabricantes de series pequeñas, como McLaren y Aston Martin, “salvaguardando así algunas de las joyas más icónicas de la industria automovilística británica”, destaca el texto.

Con vistas a facilitar la transición ecológica, se permitirá la venta de coches híbridos como el Toyota Prius y el Nissan e-Power hasta 2035, detalló el pronunciamiento, que avaló similares criterios para las furgonetas con motor de combustión interna.

Las autoridades aseguraron que prevén otras medidas de flexibilización para la rama automotriz y confirmaron exenciones fiscales por valor de cientos de millones de libras a fin de estimular el uso de vehículos eléctricos por los consumidores.

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